¿A quién no le gustan los juegos de mesa? Además, es una buena alternativa para pasar un rato agradable con nuestros familiares y amigos. A veces, puede parecernos todo muy monótono si estamos mucho tiempo en casa, por eso hoy te presentamos algunos juegos de mesa caseros que puedes hacer con tus propias manos. También puedes pedir a los niños que te echen una mano y pasar un rato agradable haciendo manualidades juntos. Fórmate como monitor de ludotecas y especializarte en pedagogía Montessori.
Juegos de mesa caseros
Prepara todos los objetos que te enseñamos para crear los mejores juegos de mesa caseros que se han hecho en la historia. Sabemos que los mejores resultados los ponen las ganas y la motivación, además si cuentas con la ayuda de los más pequeños os lo pasareis súper bien juntos.
Tres en ralla
Seguramente el juego de mesa casero más fácil de realizar. Solo necesitas nueve piedras y una cartulina. Si estás en casa y no tienes piedras, una buena idea es coger lacitos de pasta que utilizas para hacer ensaladas.
Utiliza una cartulina o una hoja de papel y dibuja dos líneas verticales y, perpendicularmente, dos más horizontales. Un consejo que te damos es que plastifiques el papel para que sea más resistente y duré mucho más.
Para hacer las piezas es muy sencillo. Como hemos dicho, puedes utilizar piedras o lacitos de pasta. Debes pintar tres piedras iguales por equipo y las tres restantes de diferente color. Lo bueno que tiene este juego es que harás que los más pequeños utilicen la inteligencia para intentar ganar y desarrollarán su capacidad de lógica.
Memory
Este juego puede quedar precioso y original si le ponéis creatividad. Se trata de hacer un número par de tarjetas. Podéis imprimir los dibujos, dibujarlos vosotros o dejar que los peques se pongan creativos y los dibujen ellos. Recuerda que deben hacer parejas de dibujos, sino el juego no funciona.
Este juego va fenomenal para desarrollar la memoria. Por turnos, id levantando las tarjetas intentando buscar sus parejas. Si aciertas una pareja, sigues jugando. Cuando fallas, pasa el turno al siguiente jugador. ¡Gana quien tenga más parejas reunidas!
El laberinto
Otro juego súper divertido para jugar en familia. Debéis dibujar con cinta adhesiva en el suelo, un laberinto. El objetivo del juego es soplar con una pajita una pelota sin que esta se salga de los límites del laberinto ni toque sus paredes. Si ocurre esto, se pierde turno y tenéis que dar paso al siguiente jugador. Quien antes llegue a la salida del laberinto sin desviarse gana la partida.
Futbolín
Sí, te traemos un futbolín casero para que puedas disfrutar con los más pequeños. Aunque creas que puede ser muy difícil construir un futbolín, al contrario, es súper fácil. Solo necesitas una caja de cartón, puede ser de zapatos, unos palitos cilíndricos y pinzas de la ropa.
Atraviesa la caja de lado a lado con los palitos y colócale los jugadores. ¡Las pinzas para la ropa! Aprovecha al máximo esta manualidad y decora con pintura tanto el campo del futbolín como sus jugadores. Puedes crear una equitación para cada equipo. ¡El resultado es muy divertido!
¡Party!
Si queréis disfrutar de una partida larga y súper divertida este es vuestro juego. Una interpretación del conocido Party. Tanto niños como adultos os lo pasareis en grande. Para hacer la recreación de este juego solo necesitáis imaginación, una cartulina, unos dados y unas fichas.
El tablero
Para crear el tablero del Party tenéis que dividir la cartulina en cuadrículas. En la primera casilla y en la última casilla, diferenciadlas con colores, ya que serán la casilla de salida y la del final. Se trata de una carrera, por equipos, para llegar hasta la meta. Hay cuatro juegos, que se van repitiendo a lo largo del tablero. Cada cuatro casillas, dibujad una de pierde turno, para que el juego dure más tiempo y no sea tan fácil ganar.
El juego
El primer juego, representado con un lápiz, es de dibujar. El equipo que haya caído en esta casilla deberá dibujar lo que el otro le diga. Si deben dibujar, por ejemplo, una vaca, uno del equipo tiene 30 segundos para dibujarla y que el otro integrante lo adivine. Si lo logra, pueden volver a tirar los dados y seguir jugando.
El segundo juego es el de las películas, representado con una claqueta de cine. El otro equipo, en una libreta, deberá pensar una película y cinco palabras relacionadas con dicho film. El concursante que le toque debe explicar la sinopsis de la película a los otros integrantes del equipo para conseguir, sin decir las cinco palabras escritas por el otro equipo, que la adivinen.
El tercer juego es de mímica, representado con el dibujo de una mano. El equipo que haya caído en esta casilla deberá representar con mímica, el objeto, la persona o la cosa que el otro equipo les haya dicho. Tienen 1 minuto para representarlo y que los integrantes de su equipo lo adivinen. ¡Recuerda, no se vale hablar!
Y el último juego es el de las preguntas, representado con un interrogante. El equipo contrario les deberá hacer una pregunta, también vale una adivinanza, y el equipo contrario debe responder acertadamente. Si fallan, pierden el turno.
El objetivo es llegar cuanto antes mejor a la casilla de meta. Si os equivocáis o se os acaba el tiempo en los juegos, perdéis el turno. Si caéis en la casilla de pierde turno, obviamente, daréis paso al equipo siguiente. ¡Ya veréis que es un juego de mesa casero súper divertido para pasar una tarde entretenida!
Beneficios de los juegos de mesa caseros
El beneficio principal es el ahorro de dinero. No hace falta gastar mucho para conseguir crear un juego de mesa casero divertido. Además, no solo jugando a este os divertiréis, sino también haciéndolo con vuestras propias manos. Son unas manualidades súper creativas y divertidas para hacer con los más pequeños.
Además, creando nuestros propios juegos de mesa caseros podemos cambiar las reglas del juego, las normas e innovar en sus diseños. Desarrollaremos nuestra imaginación y creatividad y tendremos un juego basado en nuestros gustos y necesidades. ¡Animaos a crear estos divertidos juegos de mesa caseros!
