Quizás en alguna ocasión has escuchado hablar sobre la agnosia. A través de las siguientes líneas te contamos todo lo que necesitas saber sobre este desconocido pero importante trastorno relacionado con la percepción. Si quieres conocer otro tipos de trastornos y a tratarlos, no dudes en echar un vistazo a nuestro Curso Atención Temprana. ¡No te arrepentirás!
Índice de contenidos
¿Qué es la agnosia?
Podemos definir este trastorno como un problema en la percepción individual. Este conduce a un error en el reconocimiento de situaciones, personas u otros elementos que, anteriormente, eran fácilmente identificables por las personas afectadas.
Es importante destacar que esta patología impide reconocer ciertos estímulos que ya habían sido aprendidos e identificados en el pasado. (Aunque también puede provocar problemas en nuevos aprendizajes).
Además, otro aspecto fundamental es el hecho de que no se produce ningún fallo relacionado con los sentidos (estos funcionan correctamente), sino que el problema radica en el registro y decodificación de la información proporcionada por los diferentes receptores sensoriales. Por lo tanto, se produce una alteración a nivel cerebral.
Tipos de agnosia
Los principales tipos vienen definidos generalmente por la naturaleza del sentido afectado. De este modo, podemos encontrar agnosias visuales, auditivas, táctiles, motoras y corporales.
Agnosia visual
Es la relacionada con el sentido de la vista. Existen dos categorías claramente diferenciadas. Por un lado, aparecen las aperceptivas, en las cuales los pacientes tienen graves problemas para categorizar los objetos. Por otra parte, las asociativas se caracterizan por la incapacidad para nombrar las situaciones que se observan.
Algunas patologías específicas de estas deficiencias asociativas son la prosopagnosia (incapacidad para reconocer rostros o caras) o la acromatopsia (se perciben todas las imágenes en blanco y negro).
Agnosia auditiva
Se relaciona con déficits en la capacidad de interpretar correctamente los sonidos. Podemos encontrar dos grandes grupos.
- La agnosia auditiva verbal (también recibe el nombre de sordera pura de las palabras) hace referencia a la dificultad para reconocer y decodificar el lenguaje y el habla de otras personas (aunque no se ven afectados otros estímulos aditivos).
- La amusia engloba los problemas relacionados con el reconocimiento y procesamiento de los estímulos musicales.
Táctiles o somatosensoriales (astereognosia)
La astereognosia es la incapacidad para identificar objetos a través del tacto. La agnosia digital (un subtipo de esta patología) afecta sobre todo a la codificación de la información recibida a través de los dedos de las manos.
Suele aparecer acompañada de otros importantes trastornos como la agrafia (imposibilidad de transmitir ideas a través de la escritura) o la acalculia (alteración de las habilidades y del procesamiento matemático).
Motoras (apraxias)
La característica principal de las apraxias se basa en la incapacidad de recordar y ejecutar esquemas motores aprendidos de forma voluntaria (estos mismos movimientos sí pueden aparecer de manera espontánea, es decir, si son realizados inconscientemente).
En relación a sus subcategorías, encontramos:
- La apraxia ideacional (deficiencias en la elaboración de secuencias de movimientos).
- La ideomotora, la cual hace referencia a la imposibilidad de responder a una orden verbal (por ejemplo, ordenar que el paciente levante los brazos).
- la constructiva (dificultad para dibujar y construir formas o figuras).
Corporales
Aquí el déficit radica en la incapacidad para reconocer e identificar el propio cuerpo. Si este problema se da con todas las partes del cuerpo humano, recibe el nombre de asomatognosia. Por otro lado, en la hemiasomatognosia esta incapacidad solo aparece en una de las mitades del organismo.
Síntomas principales de la agnosia
Existen numerosos síntomas que pueden indicarnos la presencia de esta enfermedad. Estos dependerán en gran medida del lóbulo cerebral que haya sido afectado.
Cuando está dañado el lóbulo parietal (encargado de integrar la información sensorial), las dificultades se centran en identificar objetos familiares y, en los casos más graves, los pacientes llegan a ignorar completamente la mitad de su cuerpo (actúan como si esa parte no existiera).
Si el lóbulo afectado es el occipital (centro del sistema de percepción visual), el paciente será incapaz de reconocer objetos, caras o lugares, a pesar de que sus órganos primarios de visión (retina, cristalino, etc.) funcionan correctamente.
Por último, las lesiones en el lóbulo temporal harán imposible identificar palabras, música y otros sonidos (sirenas, silbatos, alarmas, etc.).
Causas más importantes del trastorno
La principal causa es el daño cerebral. Cualquier trastorno que afecte al sistema cerebral puede provocar su aparición.
Puede manifestarse de forma súbita (si la causa es un traumatismo craneoencefálico o algún accidente cerebrovascular) o, por el contrario, ir desarrollándose de forma progresiva como, por ejemplo, en el caso de desarrollar tumores o padecer problemas de oxigenación cerebral. Las demencias y el uso de algunas drogas también pueden desencadenar las agnosias.
¿Cómo afecta a los niños?
Es fundamental identificar este trastorno lo antes posible, más aún en el caso de los niños, ya que este puede afectar gravemente a factores como la escritura, la lectura o la comprensión verbal.
Al no existir una cura directa para esta patología, es de vital importancia una estimulación temprana que pueda ayudar y mejorar la decodificación de los estímulos y la comunicación del niño.
Por regla general, en la mayoría de los casos solo se ve afectado un sentido, por lo que se recomienda también activar y focalizar los otros sentidos.
Tratamiento
Tras un correcto diagnóstico con las pruebas adecuadas (tomografía computarizada, resonancia magnética nuclear y otras pruebas de imagen), es posible llevar a cabo distintos tratamientos que mejoren las capacidades dañadas.
Uno de los métodos más utilizados actualmente (sobre todo en niños) se basa en el uso de guías o claves alternativas. Hay que enseñar a los pacientes a usar claves específicas que les ayuden en el proceso comunicativo (un bigote, un lunar, etc.).
También es recomendable la combinación de dos características (pelo corto y rizado, pantalón y cinturón…). Sin embargo, no sería aconsejable el uso de más claves de forma conjunta.
Las denominadas estrategias de organización también resultan muy adecuadas en el tratamiento de las agnosias. Se basan en organizar el entorno para aumentar la independencia del paciente. Ejemplos de esta técnica pueden ser agrupar los alimentos por categorías, ordenar las prendas por colores o guardar los objetos siempre en los mismos lugares.
Cuando el paciente se niega a aceptar la enfermedad, es preferible dividir la tarea en sus componentes más simples (ayuda al paciente a identificar dónde está el problema).
En conclusión, la agnosia es un trastorno cerebral que puede acarrear graves consecuencias, por lo que es muy importante que lo conozcas y lo sepas identificar.